Bogotá, 22 de febrero de 2020.
1. Comprendemos la situación compleja que se presenta en las veredas El Rubí, El Tapir y Aires del Meta, en límites entre La Macarena (Meta) y San Vicente del Caguán (Caquetá), determinada por condiciones estructurales de pobreza y abandono institucional, presencia de actores armados y conflictos territoriales y del medio ambiente, por ser una zona de Parques Naturales Nacionales.
2. Presumimos como legítimas las operaciones de fuerza pública y Fiscalía. Esperamos que los jueces en sede de control de legalidad se pronuncien sobre las condiciones de tiempo, modo y lugar de las mismas, y que la Procuraduría General de la Nación pondere la legitimidad del uso de la fuerza.
3. Hacemos un llamado a todos los actores armados a abandonar las vías de hecho y construir voluntad de diálogo para superar este difícil momento. Particularmente llamamos la atención para evitar exponer a niños y niñas en cualquier tipo de enfrentamiento.
4. Asimismo, exigimos a las autoridades actuar con base en los principios humanitarios de proporcionalidad y necesidad para determinar el uso de la fuerza. Deben respetar y tomar en consideración el carácter prevalente de los derechos de niños y niñas.
5. Ponemos a disposición nuestra capacidad de mediación para superar este difícil momento sin recurrir a la violencia.
6. Por parte de Defensoría Pública se seguirá brindando representación judicial y asistencia jurídica a las personas que lo requieran.